Gracias por ser mi amigo, mi hermano, mi compañero y pareja. Gracias por estar siempre en todo momento, tanto sea bueno como malo. Gracias pro dejarme siempre contarte mis cosas sin que me juzgues. Gracias por tu risa y por tus palabras de aliento. Gracias por tu ánimo en los momentos felices y por tus abrazos en los momentos dolorosos.
Lo mejor que me pudo pasar en la vida fue encontrar a alguien que tiene la mano extendida aún cuando estoy perdiendo mi camino.
Hermosos momentos pasamos juntos, también caídas, y así fue que juntos aprendimos a levantarnos.
Nadie se compara con vos: sos único, perfecto, ideal...No te cambiaría por nada ni por nadie.
Me atrapaste por cómo sos, porque me gustas así de loco, inestable y caprichoso, porque cuando me agarrás la mano todavía me emociono y me corren bichitos de todo tipo en la panza, porque te sigo esperando, porque siempre estás ahí, porque todavía me muero por verte como el primer día, porque todavía espero que me hagas reír, porque tus abrazos me llenan de paz, por estar siempre en mis mejores momentos y en los peores no soltarme, por saber quererme, por buscarme más de una vez, por dejarme ser como quiero ser y no dejar que pierda nada, por dejarme ser caprichosa, por todas las carcajadas que dibujás en mi cara y sonorizás en mis ruidos, por creer en mí, por hacerme entender que no todo es como todos lo ven, por venir a buscarme, esperarme y seguirme, por hacer que esto siga valiendo la pena. Gracias por ser mis oídos y mis ojos cuando lo necesité.
Y, por último, voy a decirte lo mucho que te amo, y con esto termino...Gracias por este tiempo compartido. Te amo de acá al cielo ida y vuelta, plenamente, infinitamente. Sos todo...Simplemente te amo.
@Incredulas - 30/05/15
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