Te besé enojada.
Te besé sonriendo a carcajadas.
Te besé rota en llanto.
Te besé en la playa, en el río y por encima de una montaña.
Te besé en el cielo, en la tierra e intermedio.
Besé tus labios cuando recién te despertabas y antes de irnos a dormir.
Besé tus labios luego de cenar, antes y durante el desayuno.
Nos besamos bajo la lluvia y derretidos en cuarenta grados de calor.
Te besé hablando.
Te besé soñando.
Te besé despierto.
Te besé jugando.
Te besé de cabeza y de pie.
Te besé cantando, gritando y murmurando.
Te besé en el invierno, otoño, primavera y verano.
Te besé en cada rincón de tu casa y el mundo.
Te besé viajando sobre ruedas y sobre alas.
Te besé con dulzura cada vez que me mirabas.
Te bese bañándonos, secándonos y vistiéndonos.
Besé tus labios caminando, corriendo y trotando.
Te besé cada rincón de tu cuerpo y de tu alma.
Te besé con lágrimas en tu rostro y sonrisas extraordinarias.
Besé tus labios mientras me hablabas y cuando callabas también.
Besé la punta de tu nariz y tus labios al fin.
Besé tu boca mientras peleábamos y cuando nos reconciliábamos también.
Besé tus labios diciéndote "adiós" y nuevamente diciéndote "hola".
Besé tus labios aún sabiendo que sería la última vez. Y todavía así pensás que temo que otros labios te rosen. No tengo miedo de que eso suceda. Más yo besé tus labios, mientras tocaba tu alma.
@Incredulas - 25/05/15
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