Duele tanto, duele pensar que una persona no es como pensamos que era, duele haber confiado tanto en una persona que nunca nos fue leal, que nos juró "amigas por y para siempre" y hoy ya no está en nuestra vida por no tener códigos con nosotras, la amistad se basa principalmente en códigos, y sin códigos no hay amistad que valga, sin códigos ninguna amistad va a ser verdadera.
Suele darnos más que dolor, mucha impotencia, porque pensamos y
no entendemos qué fue lo que hicimos mal para merecer esto de nuestras amigas, las personas que queremos como a hermanos propios, esas amigas en las que
nuestro humor depende de ellas: si están tristes, nosotras también y si están
felices, nosotras más. Esas con las que planeamos irnos a vivir juntas de
grandes, a las que le contamos historias larguísimas y nos aconsejan. Son las
personas que saben nuestra vida de memoria, a las que nunca vamos a traicionar
y muchas cosas lindas más que se viven cuando realmente tenés una verdadera amiga,
una de ellas vale oro y hay que saberlas cuidar, porque una amistad sin códigos nunca va a llegar muy lejos.
@Incredulas - 29/01/13
son unas geniasssssss
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