“Las minitas aman los payasos y la pasta de campeón”, dicen los Redondos, y es así totalmente. Siempre atrás del gil que nos hace sufrir, que no nos da ni la hora, que está con todas, que tiene fama de ganador, e ignoramos totalmente al que vale la pena, al que nos quiere hacer resucitar, el que nos haría ver el sol a la noche.
Las minitas como yo vivimos lamentándonos por amor, por fortuna, por dinero, por todo. Todo sirve para quejarnos, pero no hacemos nada para revertir nuestra situación.
Las minitas como yo nos cansamos de remar, de pelear por algo que es casi imposible de conseguir, pero como quien dice: “lo imposible sólo tarda un poco más”, no nos tenemos que rendir tan fácil. No es cuestión de suerte, porque la suerte la hacemos nosotras.
A las minitas como yo nunca las ama nadie, siempre buscamos ser amadas y no lo conseguimos porque cuando por fin alguien nos quiere de verdad, lo desaprovechamos totalmente con boludeces, vueltas y más rodeos.
Las minitas como yo nunca estamos bien, no hay poronga que nos satisfaga (hablando mal y pronto).
Como dice la frase: “la suerte de la fea, la linda la desea”, no es así; la fea no tiene suerte, solamente pelea por lo que quiere y rema, rema, rema con mucha actitud para conseguir lo que se propone. Así deberíamos hacer las minitas como yo: pelear. Si no tenemos suerte, no nos sale nada como queremos, hay que ser más fuerte que nunca.
@Incredulas - 18/09/13
GENIAS
ResponderEliminarson unas geniass.
ResponderEliminarGracias
ResponderEliminarSon unas grosas cada día las amo más !!!!!!!!
ResponderEliminar