Boicoteada

Nunca fui alguien a quien valores. Nunca me trataste del todo bien...O quizá sí al principio de la relación, pero cuando las cosas se tornaban más serias, vos tendías a rehusarte a estar conmigo. Y pesar de eso yo siempre seguí al lado tuyo, quizás porque mirarte me gustaba mucho...Era cuestión de verme reflejada en tus ojos y saber que, aunque sea en ese segundo, estabas pensando en mí, porque nuestros ojos se encontraban.
Nunca pudimos tener una conversación sin que encuentres la manera de enojarte. Siempre arruinabas cada uno de nuestros cálidos momentos con algún planteo o enojo estúpido sin sentido. Parecía a propósito. Yo nunca gané ni una pelea porque siempre te amé un poco más. Soy partidaria de pensar que en una relación manda el que menos quiere, por eso en la nuestra dominabas vos. Nuestro amor era de esos dolores que generan placer.
No alcanza con que ocupes mi cabeza todo el día, también lo hacés toda la noche, como si eso fuera poco. Ya me cansé de recordarte, me está haciendo mal...Pero a pesar de eso, te tengo más presente que nunca.
Ya es hora de entender que estás muy lejos de mí, con una nueva vida encaminada, que te importa un carajo cómo estoy porque ya no hay espacio para mí en tu mundo. A veces me entra la duda de saber si me recordás y me pensás, quizá no tanto como hago yo cada momento de mi día y de mi vida, pero por lo menos una parte.
Me encantaría poder revivir algunos de los momentos lindos que pasamos, esos momentos de locura en los que ambos fuimos cómplices. 
Eras lo único que hacía que mis días se tornen especiales y diferentes...Me resigno a admitir que ya no te tengo y que estás lejísimos de mi realidad.
¿Cómo algo tan lindo como amar puede ser castigado así? Sé que nunca tendría que haberme metido con vos, pero también tengo que aceptar que ya estás fuera de mi vida, que tengo que volver a ser feliz y libre como antes de conocerte, aunque, ahora entiendo que lo único que me hace sentir libre sos vos.

@Incredulas - 12/06/14